jueves, 4 de octubre de 2007

Una leyenda...

Cuenta una leyenda que allá a finales del siglo XVI andaba Eduard Kelly por los caminos de Inglaterra y paró en una posada para descansar. El posadero, viendo al gentilhombre como persona ilustrada, le mostró un antiguo manuscrito, junto a dos pomos de marfil, uno blanco y otro rojo en cuyo interior había unos polvos desconocidos en el rojo y en el blanco los restos de algo. El posadero le contó a Kelly que aquello había sido descubierto en la tumba de un fraile, en un monasterio católico durante los saqueos perpetrados por los protestantes a los mismos. El posadero creía que en el libro podía estar la clave para convertir cualquier metal en oro, y el contenido de los pomos lo que hacia que posible tal transformación, pero el manuscrito, que parecía contener la clave y las fórmulas necesarias estaba escrito en extraños símbolos que no era capaz de descifrar dada su escasa cultura. Kelli, asegurando al posadero que era un experto criptógrafo le pidió que le vendiera aquel manuscrito y así poder descifrar sus increíbles secretos...........